La importancia del packaging en pequeñas y medianas empresas
- Nova Studio
- 30 abr
- 5 Min. de lectura
Diferenciarse frente a la competencia es de vital importancia para cualquier negocio. Buscar ese valor añadido o punto diferencial no es fácil, sin embargo, hay una manera de conseguir llamar la atención de los consumidores sin necesidad de invertir grandes cantidades de dinero o sin ser el más creativo, el packaging. El diseño del packaging ha pasado de ser un protector de producto a convertise en una herramienta de marketing fundamental para las pequeñas y medianas empresas.
Un packaging bien pensado va mucho más allá de lo estético. Ayuda a comunicar los valores de la empresa, genera confianza y contribuye a crear una experiencia memorable desde el primer contacto. En un entorno donde las decisiones de compra se toman en segundos, ya sea en una tienda física o en una web, cuidar los colores, materiales y acabados del envase puede ser decisivo. Para muchas PYMEs, el packaging no es un complemento, sino una poderosa herramienta para destacar y vender más.

Packaging: más que una buena presentación
El packaging, sobre todo para las PYMEs, se ha convertido en un recurso estratégico que puede influir profundamente en la percepción del consumidor. Sin embargo, muchas veces es subestimado, sobre todo por empresas que están dando sus primeros pasos en el mercado.
La evidencia respalda esta idea: según una encuesta de Ipsos, el 72% de los compradores reconoce que el diseño del packaging impacta directamente en sus decisiones de compra. Esto convierte al packaging en un primer punto de contacto emocional con el cliente, incluso antes de probar el producto.
Un buen diseño de packaging puede transformar un producto común en una experiencia de marca memorable. Este impacto inicial es clave para generar una relación duradera con el cliente y fomentar la recomendación.
Para las pequeñas empresas, cada oportunidad de destacar cuenta. Un packaging bien pensado permite construir identidad, contar una historia, y fidelizar. Ya sea con materiales sostenibles, mensajes personalizados o un diseño innovador, invertir en packaging es invertir en cómo la marca es percibida.
En el mundo digital, donde las redes sociales y las compras digitales mandan, el packaging también funciona como una herramienta de visibilidad. Si es atractivo, es más probable que sea fotografiado y compartido, ampliando su alcance y fortaleciendo la presencia de marca.
El packaging como extensión de la identidad de marca
Un buen packaging habla de la marca. Es una extensión tangible de su identidad visual y su personalidad. Por eso, cada elemento del diseño debe elegirse con cuidado para reflejar coherencia con lo que la empresa representa.
Una marca comprometida con el medio ambiente, por ejemplo, no solo debe mencionarlo en su comunicación. También debe demostrarlo a través de sus acciones, como el uso de materiales reciclados o compostables. Esta coherencia entre lo que se dice y lo que se hace fortalece la credibilidad.
Del mismo modo, una marca premium necesita cuidar al máximo los detalles: el gramaje del papel, los acabados, las texturas o un diseño minimalista pueden elevar la experiencia del cliente y reforzar el posicionamiento de lujo.
La consistencia visual también es fundamental para el reconocimiento de marca. Ejemplos como Coca-Cola o Apple muestran cómo un empaque puede volverse un ícono. No es necesario ser una gran empresa para lograr esto. Las PYMEs también pueden trabajar una identidad visual clara y coherente para ganar presencia, generar confianza y destacarse frente a competidores más grandes.
Casos de PYMEs que triunfan con su packaging
Muchas pequeñas y medianas empresas han sabido utilizar el packaging como un recurso estratégico para conectar con su audiencia y reforzar su propuesta de valor. Aquí algunos ejemplos inspiradores:
1. Brava Fabrics
Esta firma barcelonesa de moda sostenible ha integrado el packaging como parte fundamental de su mensaje de marca. Utilizan materiales reciclados, evitan plásticos y apuestan por empaques compostables. Sus cajas incluyen mensajes que refuerzan su compromiso con la sostenibilidad, y su estética minimalista refleja coherencia con su filosofía de “moda responsable”. Este enfoque los ha posicionado como referentes del slow fashion en Europa.
2. Turrones 1880 (línea gourmet de exportación)
Aunque es una marca con más de un siglo de historia, Turrones 1880 supo renovarse para conquistar nuevos mercados. Su línea gourmet, pensada para exportación, presenta un packaging sofisticado que combina cartón rígido, acabados mate y detalles dorados. La elección de colores sobrios refuerza su imagen de producto premium. Esta estrategia les ha permitido consolidarse en mercados como EE.UU. y Japón, donde el empaque tiene un peso importante en la compra.
3. Minimalism Brand
Esta marca española apuesta por la transparencia y la sostenibilidad. Su packaging es simple y directo: cajas de cartón reciclado sin tintas, con solo el logotipo en negro. Este minimalismo no solo reduce costos y residuos, sino que comunica con fuerza sus valores. La experiencia de unboxing es parte del mensaje de honestidad que define a la marca, y sus clientes lo valoran como un sello distintivo.
Consejos clave para un packaging efectivo en PYMEs
Un buen packaging no tiene que ser costoso ni complejo, pero sí debe ser estratégico. Aquí algunos consejos prácticos:
Conoce a tu cliente
Antes de diseñar, es fundamental entender a quién te diriges. El packaging debe conectar con los valores, preferencias y estilo de vida de tu público.
Elige materiales de calidad
No hace falta gastar de más, pero sí seleccionar materiales que estén alineados con el tipo de producto y el posicionamiento de tu marca.
Mantenlo simple y claro
La información debe ser fácil de leer. Menos es más: logo, nombre, beneficios clave, y lo esencial. Nada de sobrecargar el diseño.
Suma la sostenibilidad como diferencial
Usar materiales reciclables o compostables puede ser un factor decisivo para muchos consumidores. Y si lo haces, ¡comunícalo!
Aprovecha el interior del packaging
Un mensaje sorpresa, una historia breve o un código QR pueden hacer que el cliente recuerde la experiencia y quiera volver.
No descuides la funcionalidad
El empaque tiene que proteger bien el producto. Una mala experiencia en este aspecto puede arruinar la percepción de tu marca.
¿Cuándo conviene trabajar con una agencia especializada?
Diseñar packaging no es solo elegir colores o formas bonitas. Implica entender al cliente, al mercado, a la marca y sus objetivos. Por eso, contar con profesionales puede ser una inversión muy rentable para PYMEs que buscan dar un salto en calidad y diferenciación.
Agencias como Nova, con experiencia en branding y packaging para empresas en crecimiento, trabajan de forma integral, desde el concepto creativo hasta la implementación final, siempre alineados con la identidad de marca.
También existen alternativas más orientadas a soluciones técnicas, como BOOSTER Packaging, que ofrecen desarrollos a medida, prototipos y producción con asesoramiento especializado.
Conclusión
El packaging ya no es un detalle menor. Hoy, es una pieza clave en la estrategia comercial de cualquier PYME. Bien diseñado, no solo protege: comunica, conecta y vende. Es la primera impresión que muchos consumidores tendrán de tu marca, y una oportunidad única para destacarte, generar valor y crecer de forma sostenible.